Descripción
Esta deliciosa fruta —que deberíamos consumir al natural en jugos o postres— tiene una gran cantidad de nutrientes, vitaminas y antioxidantes, es baja en calorías y es un poderoso digestivo natural. Su enzima papaína tiene la capacidad de digerir las proteínas de los alimentos. Además de estimular la digestión, la papaya puede usarse para tratar afecciones como la gastritis o la acidez estomacal, ya que ayuda a neutralizar el exceso de acidez del estómago. Puede ayudar a regular el colesterol y regular niveles de azúcar en sangre.
La enzima papaína que se extrae del látex, líquido blanco que se obtiene de las frutas inmaduras, también tiene otras cualidades muy utilizadas en la farmacéutica y la cosmética. Estamos hablando de la papaya como antiinflamatorio, limpiador, suavizante, exfoliante y humectante.
Su nombre científico es Vasconcellea pubescens, su cáscara es dura por lo que hay que aprender a pelarla y ojalá hacerlo cuando está bien madura para que la papaína, un líquido blanco que sale de su cáscara, no irrite tus manos. Es nativa del noreste de Sudamérica y es cultivada desde Panamá hasta Chile.